GRACIAS AMOR

Apenas te conocía cuando expresaste tu amor,

y yo sorprendida, solo pude confirmar mi cariño.

Sentía y palpaba tu adoración

en cada mirada y en cada gesto,

y sufría por no saber interpretar

mi confusión de sentimientos.

Quizá fuese mi juventud e inexperiencia,

acobardadas ante tu madurez y sapiencia.

Cuando en la soledad de mi habitación,

analizaba las emociones diarias vividas junto a ti,

solo habitaban: la alegría, cuando te veía;

y el sosiego, cuando te oía...

pero suponía que el amor, era algo más que todo eso.

Y un día mi corazón despertó de su sueño

y mirando tus ojos encontró su dueño.

Ahora en nuestra mediana edad,

agradezco tu generosidad, y

te escribo estos versos...

para agradecer tus gestos,

saturados de embeleso,

y tus frases impregnadas de deseo.

Gracias, por tu elocuencia, que inundó mi adolescencia;

por tu paciencia, que me devolvió la consciencia;

por tus miradas apasionadas, en la intimidad de una velada;

por tus encendidos besos, de pasión, mis labios llenos;

por tu alma encandilada, en busca de la mía descarriada.

Gracias por entregarme tu cuerpo,

por dibujar la luna en mis senos,

por enredar tu dedo en mi pelo,

por juntar nuestros labios obscenos.

Gracias, por embriagarme de este loco veneno.